Ana Garrido – Responsable Protocolo Ayuntamiento de Santiago de Compostela
El 25 de julio de 1122, el Papa Calixto II dispuso que cuando el 25 de julio coincidiese en domingo se celebraría el año como Año Santo. Desde entonces, el año jubilar se celebra en secuencias de 11, 6, 5 y 6 años. Este Año Santo 2021 será el 120º Año Santo de la historia.
El comienzo del Año Santo se inaugura con la apertura de la Puerta Santa de la Catedral de Santiago de Compostela la tarde del 31 de diciembre en un acto cargado de simbolismo que aúna protocolo institucional, militar y religioso.
Ha sido en un acto muy diferente al que tuvo lugar hace 11 años, el último Año Santo, dadas las medidas de seguridad sanitarias, presentes durante las diferentes partes del acto, comenzando con la limitación de asistencia de público en la Plaza de la Quintana como en el interior de la Catedral, y la limitación al mínimo de la representación institucional.
El acto dio comienzo con una parada militar en la Plaza del Obradoiro, en el que el Delegado Regio, D. Alberto Núñez Feijóo, Presidente de la Xunta de Galicia, acompañado de D. Juan Francisco Arrazola Martínez, General Jefe del Mando de Apoyo a la Maniobra (antes Fuerza Logística Operativa) pasó revista a las tropas militares que le rindieron honores para, a continuación proceder al saludo de la línea de autoridades, limitada en esta ocasión al mínimo de representación institucional, acompañado por el alcalde de la ciudad, portador del bastón de mando.
Una vez finalizado el saludo a las autoridades, éstas se disponen en comitiva y se dirigen a la Plaza de la Quintana para asistir al acto de apertura de la Puerta Santa. Esta comitiva está encabezada por los Maceros del Ayuntamiento, tras ellos la Corporación Municipal, las autoridades (de menor a mayor rango) y, por último, el Delegado Regio, escoltado por cuatro Lanceros, y las primeras autoridades (de mayor a menor rango), que junto a dos Guardias de Gala cierran la comitiva de autoridades. Tradicionalmente, todas las autoridades civiles que conforman la comitiva asisten a la Plaza de la Quintana, pero debido a la situación originada por la pandemia, sólo las primeras autoridades pudieron estar presentes, mientras que el resto de autoridades pudo seguir la parte central del acto desde el interior de la Catedral.
En la Plaza de la Quintana, da comienzo el ritual de apertura de la Puerta Santa, presidido por el Arzobispo de la Archidiócesis de Santiago, D. Julián Barrio Barrio, y al que asistió el Nuncio de su Santidad el Papa en España, D. Bernardito Auza. En este ritual, el Arzobispo procede a golpear tres veces la Puerta Santa para proceder a su apertura. Una vez abierta la Puerta Santa, él será el primero en cruzarla, seguido por la comitiva eclesiástica y, a continuación, por las autoridades civiles.
Por último, la jornada termina con la celebración de una eucaristía en el interior de la Catedral de Santiago en la que el representante de la Santa Sede anunció la decisión del Santo Padre, a través de la Penitenciaría Apostólica, de prorrogar el Año Santo Compostelano durante el año 2022 debido a las circunstancias provocadas por la pandemia del COVID-19.
Quiero hacer ver, con este pequeño resumen del desarrollo de la apertura de la Puerta Santa, que este es un acto lleno de tradición y de simbolismo, de costumbres que se han mantenido a lo largo de los siglos y en el que confluyen los protocolos de distintas ramas, lo que supone la coordinación de múltiples instituciones: el Ayuntamiento, la Iglesia, la Xunta de Galicia y las Fuerzas Armadas.